sábado, 11 de septiembre de 2021

Un día de " invasión " inmigrante .

        Que ninguno de los buenistas que pueda leer esto se lleve las manos a la cabeza , la palabra ofensiva está entrecomillada . Además , las invasiones del siglo XXI no se dan como las de antes , vía manu militari . No . Las de ahora son más sentimentales ( el arma es dar pena exagerando el victimismo ) y de hechos consumados , entrar ilegalmente en otro país . Los sucesos de Ceuta de hace poco son un inmejorable ejemplo de lo que digo . 

   Sucede que en las invasiones militares de antes y en las sentimentales y de hechos consumados de ahora , los que más sufren las consecuencias son las clases bajas del país invadido . Cuando los visigodos invadieron el Imperio Romano de Occidente emparentaron no con los campesinos y si con los terratenientes romanos . Otro tanto se puede decir de la invasión musulmana del s. VIII . Los de abajo cambiaban de dueño , pero hoy en día han de competir con los recién llegados o inmigrantes por el escaso empleo y las menguantes ayudas sociales . 

   Visto así , lo de invasión puede ir perdiendo las comillas iniciales . Si la afección es económica y negativa ( dejo de lado la cultural ) esa fea palabra va siendo legítima en este tema . Pero expongo los hechos que , significativamente , he visto en este día para justificar el título . 

  Mañana . Voy al pueblo vecino a por pan . Antes de las nueve me cruzo con tres jóvenes sudamericanos . Tres recién llegados . Estos pueblos son pequeños y las caras nuevas no pasan desapercibidas . No dejan de llegar en los últimos meses incluso pandemia mediante. 

  Mediodía . Vuelvo de la casa de un amigo . Al lado de la carretera un coche viejo con el portón abierto muestra el maletero repleto de paquetes . Una pareja de latinos se afana en ordenarlos . Colijo que repartidores pirata de alguna o varias plataformas de compra-venta digitales . 

 Tarde . Baja del autobús de Pamplona un magrebí . Despistado deambula por el pueblo . Al rato una pareja de policías forales le pide identificarse . Les muestra pantallazos en su móvil a modo de respuesta . Vienen tres mujeres también magrebíes de un proto gueto ( dos viviendas ocupadas ) que ya se está formando en la parte más desvencijada de este pequeño pueblo y se lo llevan . 

   Por supuesto que no todos los días son así , afortunadamente . Pero este tres en uno que acabo de contar es más que significativo . 


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